Las mejores mascotas para Tauro

Así como somos más afines a ciertas especies según nuestro signo, las estrellas también afectan la personalidad y conducta de los animales Hechos que debes tomar en cuenta al momento de elegir a la mascota que quieres para compartir tus días.

¿Cuál es la mascota más indicada para el signo Tauro? ¿Cómo son los animales que han nacido bajo el signo de Tauro?

Las mejores mascotas para el signo de Taur
Para el sereno ser que llevas dentro de ti, lo mejor es una mascota tranquila, una criatura que sea una compañía fiel y tranquila. Una que se pueda ir contigo a la cama para date calor o que se tienda en tu regazo mientras trabajas o ves televisión. Las razas más pequeñas de perros y los gatos son, desde luego, lo más indicado para la serena personalidad de tu signo: cariñosos y demandantes. Que te permita cuidarlo y hacerlo a tu modo. Si has de elegir un perro o un gato, que los recibas desde pequeños, de manera que los críes y que se amolden a la manera en que eres.

Quieres alguien que te siga por la casa, que te espere cuando estés fueras y que se alegre de verte llegar. Concibes a las mascotas como parte de tu familia y las tratas de ese modo: como personas con la que compartes tu vida y el pan. Las ves como un deber y quieres que te devuelvan la mirada llena de amor con las que tú las ves.

Las mascotas nacidas bajo el signo de Tauro
Los animales nacidos bajo el signo del toro son hogareños y amorosos, sin importar su especie. Les gusta el cariño y el contacto humano. Buscan las caricias y pertenecer a un hogar. Son alegres y rara vez agresivos. No son animales a los que se puede sacar a pasear ni merodean por un territorio. De hecho, prefieren la comodidad de un sofá y un plato de comida cercano. No son cazadores, pero protegen a sus dueños de todo mal y agresión de ser necesario.

Las mejores mascotas para el signo de Taur son con seguridad la mejor mascota para un niño: les gusta tener siempre a la vista a sus dueños, y procuran hacerle sentir su arrebatador amor. Adoran los largos descansos en el regazo de sus dueños y contemplar las actividades humanas. Ayudan a su manera a realizarlas, y por ello no hay que ser duros con sus intentos por ser útiles.

Si se vive con depresiones constantes, en soledad o una enfermedad crónica, no hay compañía más fiel y reparadora que la estas criaturas. Pagan amor por amor, de manera centuplicada. Son guardianes que detectan tus estados de ánimo y previenen la tristeza y el dolor. Sea cual sea su especie (gato, perro, ave, reptil…) saben que hay un puente entre ellos y nosotros, y son los primeros en cruzarlo.

Algo extra: buscan siempre la manera de comunicarse contigo. Hasta intentan hablar.